Se desarrolló con éxito la jornada “Infancia Trans y Escuela: Una articulación posible”

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Con la presencia de una importante cantidad de público se desarrolló en el Cine Teatro Renzi la jornada “Infancia Trans y Escuela: Una articulación posible”, organizada por la Oficina de la Diversidad dependiente de la Secretaría de Gobierno y por la ONG Divas (Diversidad Valiente Santiagueña).

En el marco de la jornada se presentó el libro “Yo nena, yo princesa”, de Gabriela Mansilla, quien es madre de Luana, la primera niña trans en recibir su DNI. Un caso inédito en la Argentina y en el mundo.

Con una gran participación de docentes y público en general, los disertantes Pablo Herrera, integrante de la Oficina de la Diversidad; Luisa Paz, referente del Indes y Divas; y Gabriela Mansilla, trataron temas referidos a la discriminación y violencia en la etapa infantil. Así como en las instituciones educativas que todavía no han incluido en el marco pedagógico las temáticas trans y homosexualidad.

El momento más especial estuvo a cargo de Gabriela Mansilla que contó cómo fue la experiencia de luchar por los derechos de su hija, cómo surgió el libro en cuestión y actualmente cómo desarrolla la tarea de concientización en todo el país con charlas y encuentros similares.

Historia de una lucha

Gabriela Mansilla demostró ser una gran luchadora, fuerte y valiente, dando el ejemplo de que el amor de una madre no conoce de límites ni barreras.

“Luana fue la primera niña en recibir su DNI de acuerdo a su identidad autopercibida sin haber pasado por una instancia judicial a nivel mundial en el año 2013 bajo la Ley de Identidad de Género”, expresó en primer término, la madre de Luana

En cuanto a la jornada que se desarrolló en La Banda, manifestó: “Hoy vamos a tratar de articular con la escuela para ver cómo toman estos temas los docentes, es decir, cuánta información tienen al respecto y qué es lo que se puede aportar desde la experiencia propia”.

“Lamentablemente, hay poca información sobre este tema, mucha violencia. Los docentes no saben cómo trabajar. En la pedagogía de las escuelas, no están contemplados los niños ni los cuerpos trans. Es por eso que es importante reflexionar sobre esta situación en encuentros como este”, agregó.

El libro de su autoría “Yo nena, yo princesa” fue declarado de interés cultural por el Senado de la Nación y es de lectura obligatoria en institutos de formación docente en niveles inicial y primario en muchas provincias.

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